Santillana Venezuela

Problematizar, angustiar, concitar a todo el cuerpo

Subir texto Bajar texto Imprimir
(0) Reviews
Friday, December 16, 2011

Es pertenencia de lo humano no sólo crear esa relación que denominamos problema sino también resolverla de diferentes maneras, ya sea instintiva o reactivamente, como lo hacen otros seres vivos.


La génesis de esa relación, o problema, bien puede ser la percepción directa o mediada por un enunciado, por el signo o el símbolo; pero lo propio y particular es su poder de desencadenar una perturbación en el individuo. El problema existirá en la medida en que surja la perturbación y es esa perturbación, ese trastorno del orden, lo que llamamos Problematización, término vecino de la angustia, de la intriga, de la desestabilización.


Lejos de afligir, de acongojar o de paralizar, la angustia se transforma en acicate, en el llamado al cuerpo para concentrarse en la resolución o en la evasión del problema, pero si este es real, cercano e inevitable, la evasión o la postergación sólo le agregarán la carga derivada de la indecisión, pues el problema seguirá allí, inmutable, en algún lugar del cuerpo.


Esa relación que hemos denominado problema es posible en la medida en que lo percibido está en las proximidades de quienes deben encararlo y a esa proximidad la llamamos “pertinencia por continuidad”.


Alrededor de estos conceptos, vinculados con el Aprendizaje por Problemas, están en permanente giro las reflexiones sobre el pensamiento pedagógico que busca replantear la enseñanza en la segunda mitad del siglo XX y en estos inicios del siglo XXI. Sin embargo, y a pesar de que su uso es creciente en las instituciones educativas, no hemos encontrado referencias más profundas de su utilización que aborden la importancia de esta necesaria subjetivización angustiosa de un problema para que surjan soluciones con toda eficacia.


Utilizar el problema, y la Problematización, como recurso pedagógico en la interacción educativa, significa emplearlo para concitar a todo el cuerpo en la solución de esa relación entre una persona y una proposición, enunciado, situación o cosa emergente.


Esta acepción resulta diferente a la usada tradicionalmente en las escuelas cuando se reduce la definición del término problema a las cuentas aritméticas, algebraicas, químicas, físicas y de otras índoles disciplinarias. Allí no existe otra angustia que aquella que causa el temor a la probable represión profesoral –malas notas– o por no haber “resuelto” la cuenta, que en el mejor de los casos es un planteamiento hipotético sin mayores implicaciones con la intimidad del sujeto que la aborda.


La necesaria subjetivización que suscita la Problematización tiene que ver con lo que he llamado “pertinencia por continuidad”, concepto que deriva de las teorías de Vygotski sobre el área de desarrollo próximo.


Vygotski refiere que el proceso constructivo de aprendizajes y saberes se concibe como consecuencia de las experiencias y conocimiento que posee el sujeto en los límites de esa área de posible desarrollo. Agrego a ello algunas complicaciones y prefiero llamar “acervo” al cúmulo de experiencias y saberes, con la intención de indicar que aquello desde donde se disparan las construcciones de nuevos, conocimientos o aprendizajes, está en todo el cuerpo, y que el cuerpo es mucho más que recipientes cerebrales, intelectuales o mentales, o estructuras lógicas amarradas a formas convencionales de enunciar.

Los valores del acervo


El acervo, como suma de experiencias y saberes, incluye los valores, esos grandes referentes que se pueden agrupar convencionalmente –y sólo comunicativamente– como de índole ética, epistémico, estética, religiosa, ecológica, etc. Los valores se establecen como una suerte de linderos, de marcas de ruta entre la que se mueve aquello construible a partir de la creación, el saber o el conocimiento a fin de que sea comprensible y socialmente insertable.


Estos valores son instancias de fe originadas en la religiosidad humana, esa capacidad constitutiva que tenemos todos gracias a la cual dotamos de alma y fuerza generatriz a nuestras percepciones o creaciones. Esa instancia de fe origina que el acervo resida en todo el cuerpo, es decir, donde se sucede la vida social, la cultura.


Trajinar por los problemas, vivir en su abordaje y práctica es, a la vez construcción, fortalecimiento o cambio de valores. Entonces, hablar de una educación de valores es sobrepasar su connotación de prédicas, discursos o sermones, y concebirlos como un ejercicio constante y cotidiano.

Transformación pedagógica


Cuando la Problematización traspasa los umbrales de escuela, se transforma en un proyecto pedagógico, es decir, en un conjunto de problemas que se organiza y se desarrolla a partir de una angustia, de un conflicto, de una perturbación inicial. Es necesario que ese problema se aborde tal y como se da en la vida cotidiana, no como una abstracción académica, simplificada, limitada a una disciplina o asignatura. Es necesario que se aborde de manera integral y en la mayor o menor complejidad en la que se produzca originalmente.


Así, el “problema” se hace problematizador en la medida en que se aproxima al aprendiz a su acervo, a las memorias de su cuerpo. Allí palpitan, más que como abstracciones académicas, como huellas ardientes esperando ser activadas, una y otra vez, para retomar y profundizar lo ya vivido, lo ya poseído.


Las ventajas de trabajar por proyectos y por problemas no se agotan con lo antes dicho. La complejidad de un proyecto honesto, integral y vinculado a la inmediatez y cotidianidad del aprendiz, lo hace susceptible de ser explotado, de hacerlo explotar en infinitos componentes y en variados integrantes que derivaran en un curso similar al que la lógica hipertextual permite.


Así, de un proyecto que podemos llamar “¿Cómo es mi casa?, se podrá continuar al dormitorio, de este a la cama, de ésta a las sábanas, de ellas a la tela, al hilo, al algodón… en un destramado progresivo donde cada insurgencia se convertirá en otro problema en si mismo, que toma sentido de su anterior inmediato.


Es así como esa manera de interacción educativa que hemos denominado proyecto de aprendizaje, se transforma en un conjunto de problemas organizados con un cierto sentido o propósito, y permite, al mismo tiempo que se hacen cosas, construir los aprendizajes correspondientes. El proyecto será entonces determinante para organizar un curso de actividades que doten de sentido aquello que se va haciendo, o las informaciones que con ese propósito se van suministrando. Sólo de esta manera, el aprendiz se comprometerá éticamente con el devenir de actividades y sus propósitos; y la educación tendrá a su disposición un instrumental ético y organizador para cohesionar a una individuo, a un grupo, a una comunidad en torno a esos propósitos y darle sentido a las tareas que, de otra manera, resultarían aisladas y difíciles de comprender y de valorar durante el trabajo escolar.

¿Qué te pareció este número
de PIZARRA Santillana? ¡Danos tu opinión!

  ¿Lo calificarías?

SUSCRÍBETE GRATIS

BUSCADOR

Encuesta

¿Cuál de estas palabras crees que define mejor el ejercicio docente?

  • Necesario
  • Enriquecedor
  • Hermoso
  • Demandante
  • Ingrato
 
Ver resultados
Propón tu Encuesta

Otras publicaciones

  • IDEAS para ENSEÑAR matemática

    Nº 6
    IDEAS para ENSEÑAR matemática

    (0)

    Santillana te acompaña en la tarea de enseñar matemática. Aquí encontrará

  • Las HABILIDADES<BR>COGNITIVAS<BR>en la escuela

    Nº 5
    Las HABILIDADES
    COGNITIVAS
    en la escuela

    (1)

    Aprender a aprender y aprender a pensar han sido y son propósitos ir

  • INTELIGENCIA EMOCIONAL: cómo aplicarla en la práctica docente

    Nº 4
    INTELIGENCIA EMOCIONAL: cómo aplicarla en la práctica docente

    (4)

    Por: R. Colom y M. Froufe

  • Enseñar historia desde la cotidianidad

    Nº 2
    Enseñar historia desde la cotidianidad

    (0)

    En los libros escolares, como en el pensum, en el discurso docente y en los

  • En nuestro cosmos de escuelas y libros...

    Nº 3
    En nuestro cosmos de escuelas y libros...

    (1)

    ...la Navidad no necesita más estrellas. Cada niña, cada ni&n

¡Estamos de aniversario! SANTILLANA celebra 47 años en Venezuela

SANTILLANA es un libro abierto para ti desde 1977. Un libro lleno de trayectoria y calidad. <... Dinos tu opinión

Ver más artículos
ASESORÍA Y VENTA
PositivoPositivoPositivoPositivoNegativo 7 Reviews de los usuarios

Solicita la visita de nuestros promotores y potencia tu lista escolar. CONTACTO: Call"... Dinos tu opinión

Visita el catálogo
Conexos
Footer Footer
® Santillana Venezuela. Todos los derechos reservados. Rif. J-00105613-0. Desarrollado por: Antipasto Estudio
Mejor visualización con Internet Explorer 7.0 o superior, Firefox, Chrome o Safari